Proyecto: Academie MWD
Arquitectura: Carlos Arroyo Arquitectos
Ubicación: Dilbeek, Bélgica
Arquitecto Asociado: Eld Partnership, Antwerp
Superficie Construcción: 3,554.76 m2
Contratista: Kumpen
Ingenieria: Ingenium, Bruges
Estructura: Norbert Provoost, Ghent
Concurso: 2006
Construcción: Diembre 2010 - Abril 2012
Fotografía: Miguel de Guzmán
Los volúmenes del nuevo edificio se sitúan en suave transición entre la escala de las viviendas unifamiliares al este y, al sur-oeste, el imponente edificio del Centro Cultural Westrand del arquitecto flamenco Alfons Hoppenbrouwers. La entrada principal se enfrenta a la del centro Cultural y al camino del Ayuntamiento sobre la zona de aparcamiento, mientras que el extremo opuesto se mezcla con la reserva natural de Wolfsputten.
Nos encontramos en el límite entre la ciudad y el bosque y queremos mantener ese delicado equilibrio. La Academie y su Auditorium deben ser simbióticos, funcionando juntos pero manteniendo su independencia. Tendrán un acceso y vestíbulo comunes con servicios compartidos, pero con un punto de control en una situación estratégica para separar los dos recorridos de público. En el primer piso, el escenario tiene una conexión directa con la Academie.
El diagrama se traslada directamente a la sección, con el Auditório sobre el acceso. La Academia y el Auditorio se conectan internamente en la planta superior, directamente sobre el escenario. Otro factor determinante de la forma es la necesidad de ofrecer suficiente superficie de paneles solares con buena orientación. Por otra parte, la entrada ha de estar protegida de la frecuente lluvia para proteger los instrumentos musicales al entrar, o al salir y esperar la llegada del medio de transporte.
La Academia tiene una disposición lineal en dos bandas de diferente ancho, separadas por el pasillo central. Este esquema permite distribuir facilmente los espacios según los diferentes tamaños de aula requeridos. La cubierta de cada banda sigue un ritmo diferente, lo cual permite completar la iluminación natural por la fachada principal con unos huecos singulares en la fachada opuesta.
Se trata de un sistema estático con una percepción dinámica. Mirando desde la izquierda se ve el bosque. Mirando de frente a la fachada se ve el cuadro, junto con algunas escenas del espacio interior como la clase de ballet. Mirando desde la derecha se ve el azul y gris del cielo y el Westrand.
La paleta de colores para los suelos está basada en el cuadro de Alfons Hoppenbrouwers. Todo lo demás es blanco. Ladrillos pintados de blanco, absorbente acústico blanco, techos blancos. Los suelos de color marcan cada espacio en fuerte contraste con la blancura del resto. En el área administrativa, donde el muro existente nos recordará el pasado, proponemos utilizar un patrón de baldosa hidráulica, como las que se pueden encontrar en los edificios del s.XIX y principios del s.XX.
El auditorio es de madera. Las bancadas son sencillamente las vigas estructurales en TT forradas de madera. La curva de visibilidad está calculada para que en el futuro se puedan instalar butacas.
NOTA: La ubicación geográfica de esta obra no es exacta y tan solo representa su localización en la macro escala. Si conoces la localizacion exacta, puedes colaborar con arquiTOUR y hacernosla llegar a través del formulario de contacto.