Proyecto: Velódromo Sinaloa
Arquitectura: BNKR Arquitectura
Esteban Suárez
Ubicación: Culiacán, Sinaloa, México
Líder del proyecto: Laura Fontaine & Mitl Gaxiola
Equipo del proyecto: Emelio Barjau, Angel Rivero, Adrian Aguilar, Francisco Cruz, Marcell Ibarrola, Diego Eumir, Paul Chavez & Jaime Sol
Iluminación: Noriegga Iluminadores
Diseño Estructural: DAE
Instalaciones: DCP
Superficie: 61,235 m2
Estatus: En proceso
Renders: Cortesía BNKR Arquitectura
El ciclismo profesional ha crecido de sobremanera en el estado de Sinaloa en la última década. Gracias a las victorias olímpicas y una prensa entusiasta, atletas estrella internacionales han generado una gran atracción a este deporte. En Culiacán existe un gran interés por construir un nuevo velódromo así como incorporar políticas que favorezcan el ciclismo como modo de transporte alternativo en la ciudad. Nuestra visión canaliza este entusiasmo por el ciclismo en una sola propuesta que une un complejo deportivo con el desarrollo de un parque orientado al ciclismo.
Nuestra propuesta son una serie de rampas en espiral que ascienden alrededor y por encima del velódromo olímpico en Culiacán y que buscan conectar el edificio con el contexto urbano. Hoy en día los velódromos alrededor del mundo son complejos rodeados por grandes explanadas de estacionamiento. Para contrarrestar este acercamiento a los complejos deportivos que dan prioridad al automóvil, buscamos una total integración con el parque del rio que se encuentra a su costado.
Las ciclovías del Parque de la Riberas las adentramos al terreno y las enrollamos alrededor y por encima del velódromo como rampas que forman la cubierta. Las dos rampas principales están contenidas dentro de una estructura de armadura continua y se juntan en la parte superior en un anillo mirador y forman un circuito que sube y después baja. La totalidad del recorrido es de 3.5 km de largo. Desde el exterior y el interior del velódromo, se pueden apreciar a los usuarios andando en bicicleta en la cubierta del edificio.
Desde el interior de las ciclovias se pueden apreciar las competencias y eventos dentro del velódromo o sirve de mirador continuo para apreciar la ciudad. El propósito de nuestra propuesta es conectar a los ciclistas amateurs con el mundo del ciclismo profesional generando a la vez visibilidad, participación ciudadana e interés del público en general. La piel que envuelve al velódromo es una continuación del tejido urbano, una cubierta viva y habitable, un nuevo espacio de esparcimiento en la ciudad.
NOTA: La ubicación geográfica de esta obra no es exacta y tan solo representa su localización en la macro escala. Si conoces la localizacion exacta, puedes colaborar con arquiTOUR y hacernosla llegar a través del formulario de contacto.